Esta entrada de hoy es una celebración porque ¡¡acabo de llegar a las 500 visitas!! Imagino que muchas de ellas habrán sido por error, y otras tantas de los bots o de lo que sea... en cualquier caso, me hace mucha ilusión, así que hoy una entrada especial.
Esta entrada es una interpretación de una receta mítica de uno de mis restaurantes favoritos de Zaragoza (imagino que si eres de Zaragoza ya lo habrás adivinado, se llama La Senda). No debería hacer publicidad porque las listas de espera que tiene el restaurante son increíbles (y eso me perjudica, porque me gusta ir de vez en cuando), pero no me parecería justo no citar la fuente.