Hoy traigo una entrada que es, literalmente, la mejor tarta que puedes hacer. Sí, el chocolate mola, la vainilla, bla, bla, bla. Pero la zanahoria tiene ese punto exótico que hace que te pregunten ¿cómo? ¿una tarta con zanahoria? Yo es que flipo, pavo (o algo así, no sé como habláis los jóvenes ahora porque soy un boomer).
¿Sabías que la zanahoria era blanca-púrpura-amarilla o de otros colores, hasta que en siglo XVI los holandeses, muy patriotas ellos, seleccionaron y multiplicaron las variedades naranjas en honor a la casa real holandesa, la casa Orange? ¿Sabías que la zanahoria cocida tiene un índice glucémico similar al del azúcar, dado su alto contenido en carbohídratos? Ya tienes unos datos para impresionar a tus comensales. Y además, mira qué pintaza...